Eliminó el cruce informático entre el Sistema Informático Malvina (SIM) y el Manifiesto de Exportación (MANE) para la vía aérea, reduciendo tiempos y simplificando el circuito a los exportadores.
La Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA) introdujo modificaciones al régimen aduanero vigente con el objetivo de modernizar y agilizar los procesos vinculados a las exportaciones. A través de la Resolución General N° 5745/25, el organismo eliminó el requisito del cruce informático entre el Sistema Informático Malvina (SIM) y el Manifiesto de Exportación (MANE) para la vía aérea, reduciendo tiempos y simplificando el circuito para los exportadores.
La medida busca simplificar ciertos controles previos y la eliminación obstáculos innecesarios, en particular para el sector agroindustrial y los envíos en consignación. La norma adecua el proceso de liquidación de reintegros y derechos de exportación, en línea con la normativa vigente y la automatización de procesos.
Anteriormente, existían autoliquidaciones obligatorias de derechos de exportación en operaciones bajo el Régimen de Envíos en Consignación y en exportaciones de cueros. Ahora, dejarán de aplicarse dichas autoliquidaciones en consonancia con lo dispuesto en la reciente Resolución N° 727/2025 del Ministerio de Economía.
Respecto de la liquidación de beneficios, será automática a través del SIM, siempre que se cumplan ciertos requisitos operativos y documentales, tales como:
• Ser exportador habilitado y sin embargos.
• Cumplido de la operación registrado.
• Presentación de factura comercial y otros documentos exigidos.
• CBU declarado y vigente.
• Derechos de exportación abonados, en los casos que corresponda.
• Conformidad del Banco Central de la República Argentina (BCRA) respecto a la liquidación de divisas, cuando aplique.
Esto representa una mejora sustancial, dado que anteriormente no se podía avanzar en la liquidación sin verificaciones manuales y múltiples controles previos al proceso de pago.
De esta manera, el organismo busca agilizar los trámites, reducir cargas administrativas y fomentar un entorno más competitivo para el comercio exterior argentino, especialmente en sectores estratégicos como el agroindustrial.